¿Inteligencia Artificial en el vino? ¡Pues sí!
Por suerte las máquinas todavía no pueden tomar vino, pero sí que nos pueden echar una mano a la hora de evaluarlo.
Desde TasteLab participamos en el proyecto VitIA 5.0. Este proyecto abordará distintos temas, desde la mejora de la productividad, pasando por el aumento de calidad de los vinos y tocando también la sostenibilidad de la producción.
Múltiples empresas se han puesto manos a la obra en este proyecto organizado y gestionado por el Cluster Alimentario de Galicia (CLUSAGA), aportando las herramientas, capacidades y experiencia necesarias para conseguir la mejora de los procesos de producción del vino.
Con la participación de dos Denominaciones de Origen como son la de Ribeiro y Rías Baixas y de empresas como Viñacosteira y Paco y Lola, TasteLab aportará el análisis sensorial para comprobar las cualidades de ambos vinos, poniendo a disposición del proyecto, no sólo un panel de catadores entrenados, si no que también una potente herramienta de análisis sensorial y estadístico como es SENSESBIT, entre otros aportes.
Junto con el resto de empresas, lo que se pretende, es dar uso de la Inteligencia Artificial para cotejar los datos provenientes tanto de sensores estratégicamente situados en determinados puntos clave de la producción, como los datos obtenidos de las propiedades sensoriales de cada uno de los vinos.
Por otro lado, se llevarán a cabo desarrollos en materia de ciberseguridad y trazabilidad entre otros campos de desarrollo del proyecto.
Al concluir este proyecto habremos mejorado toda la cadena de valor en la producción de vinos, imponiendo un antes y un después en el campo de la viticultura.