Si la intención es esperar a que la gente (el consumidor final) nos diga cómo debemos cambiar el producto o cómo lo mejoraríamos, no será fácil encontrar la fórmula del éxito. Lo que el consumidor puede decirnos es “si le gusta o no le gusta”, o como mucho, podrá decir “me gusta, porque está rico”, es decir, información importante, pero no la suficiente para crear productos más ricos.
Por suerte, podemos usar técnicas específicas para obtener este tipo de información, técnicas sensoriales que nos permitirán crear productos más ricos, mediante la utilización de paneles de catadores entrenados que están capacitados para reconocer aspectos sensoriales que van más allá de “me gusta/me disgusta”.
Las técnicas sensoriales en las que se utiliza la información aportada por los catadores entrenados, son clave a la hora de diseñar y/o rediseñar productos, ya que permiten saber exactamente cuáles son los atributos sensoriales específicos. Surge aquí un nuevo camino para la industria alimentaria, cuya intención sea crear el producto más ricos del mercado.
Los nuevos avances en técnicas estadísticas, permiten además cruzar y relacionar los datos que aportan los consumidores del tipo “este producto es el que más me gusta” con los datos que aportan los catadores entrenados del tipo «este producto presenta el sabor menos ácido, más salado y su textura es la más crujiente”.
En tastelab contamos con todas las herramientas sensoriales necesarias para crear productos exitosos en el mercado. Para más información: tastelab@localhost